ACTITUD PARA INICIAR EL AÑO

Veamos ésta descripción que encontré en Internet: La actitud hace referencia a la personalidad, al temperamento que muestra una persona ante una situación, a la postura que adopta en cada momento.

De ti depende si tienes una actitud “positiva” o una actitud “negativa” ante esas situaciones.

Bienvenido 2023: un nuevo año, nuevas oportunidades, nuevos comienzos, nuevos logros, nuevos aprendizajes y la lista podría seguir.

Pero el éxito o fracaso tanto en nuestra vida personal, laboral, escolar y en cualquier ámbito en que nos desempeñemos.

Lo primero que nos ayudará a tener una buena actitud, es tener metas y un plan de vida con objetivos para alcanzar cada día, desde los más sencillos como por ejemplo: qué compras tengo que hacer en el mercado o tengo que limpiar mi escritorio hoy, hasta ir al dentista para reparar mi muela dañada, o trabajar en x o y proyecto y así cada día.

El inicio de año es un arma de dos filos, como lo veo yo.

Por un lado, a partir de los propósitos del año con las 12 uvas que lo tomamos como una tradición o un juego, estamos llenas de entusiasmo porque inicie el año pensando que todo irá a mejorar con el cambio de calendario. Y posiblemente sí. Ese entusiasmo nos anima a proponernos una gran cantidad de cosas, iniciar la “dieta” por ejemplo.

Pero al mismo tiempo, o por otro lado por así decirlo, conforme empieza a transcurrir el año nos damos cuenta que esos objetivos no eran muy realistas, o que no estamos haciendo nada por cumplirnos, y nos enojamos, nos entristecemos y nos empezamos a decepcionar al no cumplir lo que las 12 uvas nos marcaron.

Entonces, para evitarlo, veamos el año que inicia día por día. Vivir el presente es lo que recomiendan la mayoría de Gurus, sin duda alguna están en lo cierto. Vivir cada día con actitud positiva, levantarnos por hacer algo bueno ese día, poco a poco las cosas y circunstancias se acomodan, pero tenemos que ser positivas.

Ser positivas no solo nos ayuda a que nuestras situaciones se resuelvan y nuestros días sean buenos, si no además, contagiamos esa buena energía a las personas que nos rodean.

¿A cuántas personas saludaste hoy en la calle cuando saliste? O solo ibas viendo tu camino, con cara de amargada y ensimismada en tus pensamientos.

Mi hermana cuando sale conmigo se ríe de mí, porque de mi casa a 5 cuadras donde tomamos el bus, yo ya saludé por lo menos a 10 personas, empiezo con las conocidas, vecinos, los polis que están afuera de un laboratorio, la señora que cuida los carros, las señoras de la venta de tortillas y la de los jugos de la esquina y así. Claro ahora me es más fácil porque no uso la “mascarilla” en la calle (porque soy rebelde ya saben) y pues me pueden ver las sonrisa.

Por años trabajé en servicio al cliente y aprendí a tener esa buena actitud.

Aunque me disculpo si alguna vez te he respondido mal un mensaje, pero es que ahora hago el trabajo de todo un equipo de personas (no solo servicio al cliente) y eso me reduce el tiempo por así decirlo y me agobio un poco, porque quiero tener todo terminado, listo y bien hecho. Ser mi propia jefa no es fácil, soy muy exigente.

En fin, no es excusa, tengo que mejorar en mi carácter.

Bien espero haberte animado a tener una buena actitud para que tu vida sea más plena y en paz que al final es lo que todas buscamos, fuera gente tóxica y bienvenida gente buena vibra.

Abrazos de la Armonía, nos seguimos viendo.